viernes, 16 de noviembre de 2007

invitada presente

Otra vez otoño y las hojas caen
de los árboles casi desnudos
casi amarillos.
Olor neutro y gélido
corta las palabras antes de decirlas.
Hay frío también en las heridas
y la soledad asoma desde la ventana
y saluda sarcástica,
e intenta entrar...
¡error!
Ya dentro esta MI soledad:
no necesita invitación,
no necesita tocar la puerta ya abierta,
no necesita marcharse.
Busca un rincón abrigadito en mi habitación
se sienta a tejer
la enrevesada historia que aún me queda
por no vivir.
MENDIGA VOZ

Y aún me atrevo a amar
el sonido de la luz en una hora muerta,
el color del tiempo en un muro abandonado.
En mi mirada lo he perdido todo.
Es tan lejos pedir.
Tan cerca saber que no hay.
--------------------------Alejandra Pizarnik


Arremete la viajera ilusa contra el viento y el tiempo dormido,
intenta despertar del sueño
o seguir durmiendo bajo el manto tenue de bruma otoñal.
Ya no hay razones para ir,
de un lado a otro
ni para creer en la vida eterna.